viernes, 8 de noviembre de 2013

Grande Darío...


La pregunta que da título a este libro es la primera de una serie que se abre a lo largo de sus páginas. Porque, ¿quién dijo que debería servir para algo? Si buscamos una primera respuesta en la definición misma de la palabra la filosofía como amor al saber, antes debemos también elegir entre dos alternativas: ¿se trata de buscar el saber y alegrarnos cuando creemos haberlo encontrado o de aceptar que no vamos a encontrar lo que estamos buscando?

 


La historia de la filosofía occidental está estructurada sobre la base de un pensamiento de opuestos que necesitó de ciertos conceptos para decir lo suyo: el bien y el mal, lo verdadero y lo falso, el ser y la nada, lo útil y lo inútil Según esta lógica, la filosofía no vendría a servir para nada. ¿Pero y si, como propusieron los filósofos contemporáneos, fuera posible salir de esa dicotomía?
Es en esta grieta donde se sitúa Darío Sztajnszrajber para demostrar que la filosofía no es más que una manera de pensar. De los presocráticos a Derrida y de Platón a Heidegger, el autor sigue la pista del crujido que escuchamos cuando sentimos que las cosas tal vez no sean como creíamos que eran.
Contra el método y cualquier tipo de sistema, y en un afán por devolverle a la filosofía su espíritu original, ¿Para qué sirve la filosofía? (Pequeño tratado sobre la demolición), el primer libro de Darío Sztajnszrajber, recorre la historia de la filosofía demoliendo ideas, hoteles y nuestra propia vida, tras una respuesta que quizá no exista.” (contratapa)

domingo, 29 de septiembre de 2013

Cartas marcadas (un lindo tanguito)

         Sombra
que oscurece la ilusión
         Pena
que se llama igual que vos.
 Viento del presentimiento
 que ya es un lamento
por lo que vendrá.
         Miedo
del que no puede soñar
sin adivinar
que al final vendrá el dolor.
 
Me llevan rumbo al fracaso
huellas que nacieron antes que mis pasos.
Al fin es cada esperanza
sombra fugitiva que nunca se alcanza.
 
Buscar, soñar, volver a golpear
la puerta negada que no se abrirá.
Jugar con cartas marcadas,
trampas de la nada, mi vida y mi amor.
 
         Mano
que sostiene tu puñal.
         Copas
que brindan por mi final.
Vanas sombras de un espejo
que sólo es reflejo de otra voluntad.
 
         Miedo
de sentir la humillación
de que mi dolor
venga de otro corazón.
 
Me llevan rumbo al fracaso
huellas que nacieron antes que mis pasos.
Al fin es cada esperanza
sombra fugitiva
que nunca se alcanza.
 
Buscar, soñar, volver a golpear
la puerta negada que no se abrirá.
Jugar con cartas marcadas,
trampas de la nada, mi vida y mi amor.
 
                                                                                       Alejandro Dolina
 

sábado, 28 de septiembre de 2013

Donde no se lee

Este mediodía yo te escribiré
una larga carta sin solución
te mando una estrella, tú la brillarás
y donde diga siempre me recordarás

Se que caen las palabras como nieve en un jardín
las flores se ocultan y todo es asi.
Tengo una ilusión sólo sin querer
tal vez la carta regrese contigo aquí

Donde diga punto yo podré empezar
donde diga coma tu me besarás
y cuando te detengas yo te cantaré
una melodía para esperar

Cierra ya tus ojos nena y dime una verdad
jurame que siempre mi carta leerás.
Hay una oración que no podré escribir
dice mil veces que tus manos yo asi perdí

Es que hay una armonía donde no se lee
donde el papel quedó en blanco

Donde diga punto yo podré empezar
y donde diga coma tu me besarás
y cuando te detengas yo te cantaré
una melodía para esperar

se que caen las palabras como petalos de un mal...
Oh... Oh...
tengo una ilusión y tengo este dolor
la carta no vuelve contigo aquí

y hay una armonía donde no se lee
donde el papel quedó en blanco.


L.A.Spinetta.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

La última vez

¿Cuándo fue la última vez que te preguntaste? No buscando una respuesta ni encontrando una certeza, sino la última vez que te escapaste de lo cotidiano y te detuviste. No por cansancio ni por desidia, sino porque sí. ¿Cuándo fue la última vez que te detuviste y dejaste que todo a tu alrededor flotara? Como quien se anima a desconectar las cosas, a quitarles su carácter de utilidad, a sacarlas de la lógica del cálculo. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo que no sirviera para nada? Para nada ni para nadie, ya que las servidumbres se presentan de formas muy misteriosas. Algo que no fuese pensado desde la ganancia, el interés o el egoísmo. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo porque sí? No porque te convenía o porque lo necesitabas, o incluso porque lo querías; sino porque sí. O al revés: ¿cuándo fue la última vez que la casualidad hizo con vos algo? No algo productivo, ni profundo, ni siquiera algo en sentido estricto. ¿Cuándo fue la última vez que le diste un abrazo a alguien? No a tus seres queridos ni a personas conocidas, sino a “alguien”, no importa a quien. ¿Cuándo fue la última vez que diste? No importa qué. Un regalo no vale por lo que es, sino que vale en tanto regalo. Un regalo no vale. Un regalo no es. Se da y no vuelve. ¿Cuándo fue la última vez que te abriste? ¿O que no te cerraste? ¿O que demoliste tus puertas? ¿O que dejaste entrar al indigente? ¿O que ese otro irrumpió en vos y te llevó puesto? ¿Cuándo fue la última vez que recordaste? No cuando vence la factura de gas o la fecha del examen, sino que te recordaste como una trama, como una huella, como parte del relato en el que te ves inmerso, como el deseo de querer seguir narrándote. ¿Cuándo fue la última vez que lloraste? Simplemente lloraste. De alegría, de tristeza, da igual. Llorar, como quien expresa en ese acto primitivo la existencia viva; como quien solicita, pide, ruega, pero no reclama, ni exige, ni cree merecer.¿Cuándo fue la última vez que te perdiste? No en esta calle o en este trabajo o con este proyecto compartido. Perderse, dejándose llevar por ese acontecimiento imprevisible, dejándolo ser. El mundo está repleto de carteles y señales. El mundo está lleno de héroes que te proponen un formato industrial del ser uno mismo y una carrera exitosa basada en el afianzamiento de lo que sos. No importa qué sos, sino abroquelarte en lo tuyo, o en los tuyos, y sobre todo erigir los muros que hacen del otro y de lo otro algo invisible. Por eso perderse, como quien pasea sin rumbo, o habla con una tortuga, o le pide perdón a un helado por comérselo. Como quien se baja del colectivo para caminar por esas calles extrañas, como quien encuentra una mirada que lo devuelve para adentro y cae en el abismo. ¿Cuándo fue la última vez que tuviste miedo? No por lo que te pudiera pasar, sino por pensar que tal vez nunca no te pasara nada. ¿Cuándo fue la última vez que preferiste la nada al ser, un olor a un concepto, un insomnio a un ansiolítico, un árbol viejo a un ascensor? ¿Cuándo fue la última vez que te traicionaste, que te animaste, que transgrediste, que te lanzaste, que tuviste un sueño, que creíste, que descreíste, que te arrepentiste, que te afirmaste, que te cuestionaste, que soltaste lo propio y te abriste a la pregunta? ¿Cuándo fue la última vez que te preguntaste?

jueves, 8 de agosto de 2013

Tus ojos...

Ver sus pupilas dilatadas por una fracción de segundo, posadas en mi mirada, justificó el jueves...

sábado, 3 de agosto de 2013

Dicen y dicen...

Dicen que tenemos alma…
Dicen que las personas se conocen por algún motivo
que deberán descubrir…
Dicen que las almas buscan volver a encontrarse con otras
compañeras de aventuras de vidas pasadas…
Dicen que existe el amor, y lo juran, lo firman,
lo arrugan y lo tiran…
Dicen que hay cosas que están prohibidas…
Dicen que eso no se puede, inventan reglas, culpas…
Inventan poder... ganar y poder perder…
Inventan educación…
Inventan locura…
Dicen que todos tenemos un destino escrito…
Dicen que nosotros forjamos nuestros propios destinos…
Dicen que dios existe y te va a castigar…
Dicen que la justicia es real…
Dicen que el sur…
Dicen que el norte…
Dicen que no voy a ningún lado…
Dicen que hoy voy a verte…
Dicen que somos y estamos…
Aún no descubro quien soy, pero sé que estoy…
Y vos no.

M. Coria

martes, 18 de junio de 2013

Ay ay ay, otra vez me enamoré...

hoy lo vi, desafiando al destino y al orden que alguien mas decidió...lo vi y me enamore como cada vez que lo veo...no puedo dejar de ver sus ojos, profundos y transparentes...me deja ver su alma,
cuando cerré la puerta vino a mi cabeza esta rima...realmente tiene unos ojos hermosos
 
                                                   Te vi un punto... (Rima XIV)
Te vi un punto, y, flotando ante mis ojos,
la imagen de tus ojos se quedó,
como la mancha obscura, orlada en fuego,
que flota y ciega si se mira al sol.

Adondequiera que la vista fijo,
torno a ver sus pupilas llamear;
mas no te encuentro a ti, que es tu mirada:
unos ojos, los tuyos, nada más.

De mi alcoba en el ángulo los miro
desasidos fantásticos lucir;
cuando duermo los siento que se ciernen
de par en par abiertos sobre mí.

Yo sé que hay fuegos faustos que en la noche
llevan al caminante a perecer;
yo me siento arrastrado por tus ojos
pero adónde me arrastran, no lo sé.



De: Rimas, leyendas y narraciones
Gustavo Adolfo Becker.
 
 

lunes, 17 de junio de 2013

...no habrá un destino incierto, ni habrá distancia que pueda alejarme de ti...

Del 2011 a este tiempo pasaron muchas cosas...buenas, malas, soportables, devastadoras...un poco de todo, en fin, la vida misma, pero el 8 de febrero de 2012 fue un día muy triste para muchos de los que conocimos al flaco Spinetta, recuerdo que esa tarde llovía, y entró un mensaje al celular para contarme que el flaco se nos había adelantado a todos...
tuve la misma sensación en el pecho que había soportado cuando el 24  de octubre de 2006 mi cuñado me aviso que mi mamá se había ido de este plano...
quise ese día escribir algo, pero no podía hacer mas que llorar.
recordé mi infancia que fue cuando escuche por primera vez al flaco, mis hermanos habían comprado Artaud y me atraía su voz y las melodías...así pasaron los años y crecí escuchándolo y fui entendiéndolo, me duele en noches como esta, saber que no voy a escuchar canciones nuevas, que el flaco no esta en este planeta, pero también siento muchas veces que las canciones que escucho tienen nuevos significados, no puedo decir que hay una canción que me guste mucho mas que el resto, tampoco puedo decir que todas me gustan, pero si estoy segura que para cada estado de animo que paso hay algo del flaco que suena en mi.
...y esto será siempre  así.

 
 

domingo, 16 de junio de 2013

casi dos años de ausencia...
pero siempre vuelvo, y hoy me encuentro otra vez escribiendo, feliz, con nuevas energías, con nuevos sueños e ideales...
así que...